La Puerta de Bisagra toma su nombre de la antigua puerta norte de entrada a Toledo desde la zona de la Sagra. El antiguo nombre de la puerta era Bab-al- Sagra y era una construcción islámica levantada entre los siglo X y XI. De la construcción original sólo pueden verse pequeños fragmentos en el interior del patio de armas. La puerta actual es fruto de las reformas renacentistas que se llevaron a cabo en el siglo XVI para modernizar Toledo y adecuarla a su rango de capital imperial para el rey Carlos I.
En el marco de estas modificaciones urbanística, el arquitecto Alonso de Covarrubias diseña un gran arco del triunfo con dos torreones semicirculares en el cuerpo exterior realizados con grandes sillares de granito. Sobre el arco de la puerta preside toda la entrada en águila bicéfala convertida por el emperador en escudo de la ciudad y junto a él la figura de los dos reyes sedentes acompañando al escudo. En la parte superior un ángel con la espada desenvainada custodia toda la ciudad de Toledo.
En el interior de la puerta se forma un pequeño patio de armas donde se exhibe una estatua en yeso del emperador Carlos V, realizada como copia de la de Granada con motivo de la exposición dedicada al Emperador en 1958. La puerta interna de la puerta está compuesta por torreones gemelos es obra de Nicolás de Vergara Mozo a finales del siglo XVI. En la parte central existe una pequeña estancia que servía como vivienda del alcaide para la recaudación de impuestos. Las torres están rematadas con chapiteles de cerámica con el escudo de Carlos V obra del ceramista Aguado realizados en el siglo XX.
Alrededores Puerta de Bisagra:
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