"EL MISTERIO DE SORBACES" En 1858, Francisco Morales, vecino de Guadamur, descubrió a escasos metros de aquí el tesoro más importante de los reyes visigodos conocido hasta la fecha enterrado en las tierras de la huerta de Guarrazar. Todos los atributos de su soberanía estaban cuidadosamente dispuestos allí, testigos mudos de glorias desvanecidas. Coronas de soberbia riqueza, hechas de oro fino y engastadas con perlas y zafiros, yacían aquí, entre los restos apenas visibles de una basílica real: Santa María de Sorbaces. Las coronas se vendieron y ahora se conservan en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid y el Cluny de París. Pero el misterio permaneció intacto, y desató las pasiones de la comunidad científica: ¿Por qué coronas con semejante forma? ¿Por qué un santuario real aquí? Según cuentan de padres a hijos, en estas tierras se obró un gran milagro...
DE TAL PALO… … Tal astilla. Recuerdos de ochenta generaciones de Julián Gutiérrez. ¿De qué madera está hecho un auténtico Julián Gutiérrez? No lo duden, adéntrese a conocer la historia de esta familia al grito de “de tal palo…” y podrán contemplar a algunas de sus portentosas astillas dormidas entre las brumas del tiempo. De la defensa de Numancia a la sagrada cueva de Covadonga, y de las Navas de Tolosa a la rendición de Granada, sin olvidar los horrores de la Guerra de la Independencia. Todos los Julián Gutiérrez que ha dado España aguardan para mostrar su legado y evitar que se olvide.
DESMAYARSE. Un poeta enamorado y una doncella cautivadora se encuentran en un juego de miradas y versos. Pero no es cualquier doncella… es la hija del corregidor. Cortejarla es un atrevimiento, seducirla, un desafío. Mas el amor no entiende de prudencia, y menos tratándose de un espíritu audaz como el suyo. En esta danza de palabras y promesas, cada encuentro es un riesgo y cada susurro, una amenaza. Porque las afrentas al honor –y más al de una hija– solo se lavan con sangre. ¿Podrá nuestro héroe burlar el destino o caerá presa de su propia pasión?
EL TAMBOR DE LA LIBERTAD. 1812 No luchan por ellos, luchan por aquellos que no pudieron. Las tropas napoleónicas avanzan, pero el alma de España se niega a ceder. En Toledo, la guerra oscurece las calles, pero un tambor resuena, latido firme de un pueblo indomable. Antonio, cubierto de polvo, avanza junto a Valle, espíritu rebelde. Cada golpe del tambor es una chispa de esperanza, llamando a los hijos del fuego. Es la gesta de un pueblo invencible. Una historia de honor y sacrificio cobra vida en un escenario imponente. Un espectáculo que emocionará a 3.000 personas por función.
El Tambor de la Libertad suena sin cesar, forjando la voluntad de una tierra que jamás se rinde. ¿Lo escuchas? Es el eco de un pueblo que nunca olvidará su lucha.
EL BODEGÓN DEL CAPITÁN Comer con un capitán de los Tercios Viejos conlleva muchas sorpresas Bienvenidos al establecimiento de un héroe. Entre 1584 y 1585, Alejandro Farnesio culminó una de las mejores campañas de la Guerra de Flandes. Todo fue gracias a la labor de un heroico capitán, que aún a riesgo de su vida logró romper el cerco. Su nombre era Juan de Amberes, y su fama traspasó fronteras hasta que, tras ser malherido en combate, decidió regresar a su tierra. Así lo cuenta a sus comensales, pues ha abierto un bodegón en Villanueva del Corral, parada obligada de todos los veteranos que regresan de Flandes. A ritmo marcial, enseña a sus mozos cómo se las gastan los auténticos veteranos. Ahora busca una nueva conquista, Ana ‘La Galveña’, a la que pretende seducir con su fama y un inesperado banquete de pedida de mano. Nada puede usurpar el amor verdadero; mas no es capitán quién dice serlo