En el año 1993 se produjo un descubrimiento arqueológico de vital importancia para la historia romana de la ciudad ya que a ambos lados de la antigua Vía Augustea que unía Córdoba y Sevilla, aparecieron dos mausoleos construidos en torno al siglo I que fueron ocupados por miembros de la alta sociedad. Esta zona que hoy en día se conoce como los Jardines de la Victoria, siguió teniendo gran importancia durante la Edad Media ya que acogía uno de los accesos principales de la ciudad conocido como Puerta de los Gallegos.
Sabemos que los difuntos debieron pertenecer a las clases altas porque sus tumbas se encuentran próximas a la ciudad y en la ley romana los enterramientos siempre se realizaban a las afueras de la urbe pero en un estricto orden jerárquico siendo las zonas cercanas las destinadas a los patricios y las más lejanas a los esclavos. Además, la tipología creada no tiene referentes en Hispania por lo que el arquitecto que las erigió debió pertenecer a otra parte del Imperio donde concoció estas estructuras funerarias, probablemente a Roma.
Estos curiosos túmulos funerarios cilíndricos fueron construidos como un gran panteón para un patricio hispano y toda su familia en una necrópolis preexistente en época del emperador Tiberio. Seguramente el Mausoleo Norte de 13 metros de diámetro que conserva la cámara funeraria fuera exclusivamente para el noble y el Mausoleo Sur, de menores dimensiones, fuese utilizado por sus familiares y allegados.
Ambas cámaras funerarias se construyeron con hormigón revestido con sillares de piedra calcarenita y en el año 1993 tras su descubrimiento se reconstruyeron siguiendo un exhaustivo procesó de anastilosis que permitió separar las partes antiguas de las nuevas para no acometer falsos históricos en el edificio. Desde este año 2021 se ha abierto al público y se permite visitar el monumento y el Centro de Interpretación sobre el Mundo Funerario que acoge en su interior mediante cita previa.
Otros puntos de interés cercanos son los Jardines de la Victoria, la Puerta de Almodóvar y la Casa Andalusí.
Visitas al interior los viernes y sábados de 11:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00.
A diez minutos a pie desde la Mezquita.
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