En la Avenida del Mar de Almería se erigen los restos de los imponentes Torreones Califales que fueron construidos en el año 955 por orden del califa Abderramán III con motivo de la creación de la medina y del recinto amurallado que la rodea. Estas torres militares se levantaron mirando hacia el mar con el objetivo de proteger la ciudad y a todos sus habitantes en caso de ataque marítimo, función que cumplieron durante siglos.
Lamentablemente, hoy en día estos torreones se encuentran en un avanzado estado de deterioro debido al propio paso del tiempo, la erosión causada por las inclemencias meteorológicas pero sobre todo, por los numerosos actos irrespetuosos que se han cometido contra ellos. Hace unos años, por ejemplo, el monumento fue taladrado para acoger una instalación eléctrica y muy a menudo soporta ser el muro elegido por los vándalos que realizan sus grafitti sobre ellos. Desde hace unos años se está intentando hacer llegar a la Junta de Andalucía la necesidad de proteger este conjunto monumental que está en grave peligro de extinción y de que sea introducido en el catálogo de Bienes de Interés Cultural para que pueda ser restaurado y puesto en valor, tal como lo merece cualquier infraestructura que haya cumplido más de mil años.
Otros lugares de interés son la Iglesia de San Roque, el Parque de Nicolás Salmerón y la Alcazaba
Monumento exterior.
A cinco minutos a pie desde la Plaza Vieja.
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